
Han tenido que pasar meses y meses, competiciones y entrenamientos, para que uno de los mejores equipos del World Tour, se pase a los discos de freno. Tal vez no por pesados con las zapatas, si no por obligación de la marca Pinarello, y también por las próximas competiciones que se avecinan... París-Roubaix u otras del final de temporada, que mezclará unas carreteras muy irregulares, junto con lluvia, barro y demás...